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8 papas medianas (1,8 kg) peladas y partidas por la mitad
60 g de manteca
1 cucharada de pan blanco rallado
2/3 taza de queso gruyere o emmental rallado
1/2 cucharadita de pimentón dulce
Precaliente el horno a 210ºC:
Unte una fuente de horno con manteca derretida o aceite.
Ponga las papas boca abajo en una superficie y, con un cuchullo afilado, realice pequeños cortes transversales, sin llegar
a partirlas del todo.
Colóquelas boca arriba en la fuente preparada y úntelas con la manteca derretida.
Hornéelas durante 30 minutos, untándolas de vez en cuando.
Mezcle el pan rallado, el queso y el pimentón y espárzalo por encima las papas.
Hornéelas otros 15 minutos o hasta que estén doradas y sírvalas al instante.
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